Alrededor del atentado contra Carrero Blanco han surgido todo tipo de teorías de la conspiración, que incluso hoy defiende la familia del presidente asesinado.
Una de las principales señala a Carlos Arias Navarro, hasta entonces ministro de la Gobernación, que después del asesinato sucedió a Carrero como presidente. "¿Cómo es posible que este señor, que tenía que haber dimitido, fuese promovido al cargo que ocupaba su protegido?", se pregunta su nieto, José Enrique, en el vídeo sobre estas líneas.
Otros miran directamente más lejos, hacia Estados Unidos, que no veía bien al presidente franquista. Sin embargo, 50 años después del atentado, el periodista Manuel Cerdán asegura que "yo he tenido acceso a documentos desclasificados de la CIA, y del Departamento de Estado, y te puedo asegurar que no existe ningún dato, la pistola humeante, en el que se vea al asesino disparando".