Jordi Évole se interesa por saber en qué invirtió Enric Duran el dinero que consiguió de los bancos. El estafador explica que lo dedicó a "movimientos sociales" y a la "financiación de proyectos" como "cubrir las iniciativas de cooperativas" afines, incluida una asociación de la que él mismo era presidente: "Se destinó a proyectos con los que había redes de afinidad".

"Pretendían juzgarme sin testigos para la defensa, lo cual es inaudito e ilegal"

Duran piensa que los bancos no le denunciaron porque "no querían dar el mensaje de la inseguridad y de los agujeros que se había demostrado en esa acción que tenían". También recuerda cómo pasó su etapa en la cárcel y afirma que su "vida en prisión seguramente era más fácil que la que pueden tener otras personas" debido a la naturaleza de su delito.

El estafador cuenta por qué no se presentó en el juicio: "Había presentado 23 testigos y la Audiencia Provincial me los había negado todos. Pretendían juzgarme sin testigos para la defensa, lo cual es inaudito e ilegal". Entre los testigos que pidió que declarasen en su juicio, destacan personalidades como Emilio Botín y otros directivos de bancos que él dice haber "expropiado".

Asegura que no se va a entregar y explica sus motivaciones: "Quiero generar un proceso en el que haya un diálogo real sobre las razones de lo que pasó. No quiero que se me trate como un delincuente que robó". A los que le acusan de defender una utopía, les contesta: "Más imposible es pensar que dentro de cien años podremos seguir viviendo como lo hacemos ahora con todo lo que le estamos haciendo al planeta. Estas locuras que podemos hacer algunos ahora pueden convertirse en la política y la economía del mañana".