El programa de Salvados con Aitana Bonmatí comienza en un terreno de juego, en un campo que lleva el nombre de nuestra protagonista. Aitana Bonmatí Conca habla con Gonzo el día en el que ese campo, en el que creció y dio sus primeros pasos como jugadora, quedaba bautizado con su nombre.

"Es un sueño. Quién me hubiera dicho que este campo llevaría mi nombre", confiesa. En su equipo, era la única niña y posiblemente la única de todo su club. Entonces, sus referentes eran Xavi, Iniesta y el Barça de Guardiola. "No eran chicas porque no se veía, no lo teníamos al alcance", reconoce.

Esos tiempos fueron "difíciles a nivel de convivencia" con los chicos con los que compartía equipo. "Sí que he tenido muchas peleas con niños de pequeña por ser una mujer. Desde insultos hasta llegar a las manos, en el patio del colegio sobre todo. Tenía carácter y salía hacia adelante, esos momentos me hicieron más fuerte. Hoy los veo como anécdotas", confiesa.