Natural se traslada a Valladolid donde vive el biólogo Alfonso Balmorí. Un hombre que no tiene teléfono móvil porque, tal y como ha observado, emite una radiación que es un efecto psicosomático y que puede afectar a los animales. De hecho, el lugar donde se citan, es una zona contaminada electromagnéticamente ya que hay cuatro o cinco estaciones base de telefonía alrededor de ese parque.

El biólogo asegura a Jalis de la Serna que durante tres años y medio estuvo estudiando 30 puntos donde contaba el número de gorriones y medía la radiación electromagnética. "Lo trabajé estadísticamente y se veía claramente que hay una correlación en muchos puntos entre el nivel de radiación electromagnética y el descenso de gorriones", asegura.

No sólo puede tener consecuencias para estas aves, según este experto. "Todos los seres vivos de la ciudad están expuestos a esta radiación", alerta Balmorí. El experto pone el ejemplo de deformaciones que ha visto en las patas de las urracas o el descenso en la reproducción de las cigüeñas. Pero no sólo en aves, también en renacuajos e incluso en árboles y plantas.

Para saber a qué niveles de radiación estamos expuestos, Jalis de la Serna muestra con sus dos móviles y con un medidor cuál es la radiación a la que está sometido. Unos niveles muy altos que, según el biólogo, afectan a la fertilidad, una consecuencia a la que nos mantenemos ajenos. "La población está muy desinformada. Pasó en su día con el tabaco, con el amianto", señala.

Además alerta de la llegada del 5G. "Lo que va a hacer va a ser poner antenas de telefonía cada 50 o 100 metros y mandar por el aire películas enteras en 10 segundos. Todo eso lleva asociada mucha radiación. Mucha contaminación", advierte.

Para saber en qué zonas se está más o menos sometidos a la radiación, existe una web que da la información de dónde están situadas todas las antenas oficiales de telefonía de toda España. Un elevado número que hace entender que antes de su instalación la población de gorriones era más grande.

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Beatriz Sánchez, ambientóloga de la Sociedad Española de Ornitología, hace un experimento en Natural con una urna de cristal, una planta, ácido nítrico y unas monedas para mostrar cómo afecta a los gorriones y por consiguiente al ser humano.

Natural también muestra cómo es el estudio pionero en el mundo en el que miden la contaminación y el desarrollo del feto durante el embarazo. Tras hablar con Mar Álvarez, coordinadora del proyecto BiSC, se llega a una conclusión: la contaminación del aire también afecta cerebro del feto de una mujer embarazada.