Una familia formada por 3 habitantes tiene un consumo medio mensual de 10 metros cúbicos. Pues según el lugar donde viva esta familia la factura del agua puede oscilar hasta 440 euros al año, Dicho de otra manera la diferencia es de hasta el 339%.

El estudio de Facua, realizado en 28 ciudades, sitúa en Murcia el lugar donde más caro sale abrir el grifo. 10 metros cúbicos, en una casa donde viven 3 personas  le saldrán casi a 30 euros al mes. En Barcelona le costarán 23 euros, casi lo mismo que en Cádiz y en Huelva.

El salto es de cerca de 20 euros al mes si lo comparamos con Zaragoza (11.31), Salamanca 12.5 o Valladolid que les costaría 10.82, el lugar con el agua más barata.
Grandes diferencias y precios al alza en un panorama en progresiva privatización. Si usted tiene un contador de 13mm y gasta 10 metros cúbicos, la factura ha subido un 2.66% en un año. Si gasta 20 m3, la subida es más considerable, 4.29% en sólo un año. Sin embargo los contadores de 15mm, que permiten más caudal y por lo tanto gastan más agua, suben mucho menos, 0.40, 3.05.

Pero el precio de la factura depende de otros conceptos, y los cánones pueden venir y variarse por parte de tantos organismo que Facua reclama un marco legal claro que unifique mínimamente precios y conceptos que repercuten al consumidor y con la reivindicación de que el mal trago de la pobreza no deje a la gente sin un derecho humano declarado por la ONU.

Muchas veces el dinero para pagar estas facturas tiene que salir de las ONGs, por eso reclaman facturas sociales que como sucede en Málaga y Sevilla, tengan en cuenta el número de habitantes en el inmueble.
En Barcelona y A Coruña aplican tarifas especiales cuando se trata de una familia numerosa de 4 o más miembros. Y en el Prat de Llobregat hace tiempo que aplican este tipo de facturas sociales.

Los ayuntamientos son los últimos responsables de llevar el agua a casa, pero queda demostrado que en España cada ciudad es un mundo.