Hilario Pino pregunta a Deborah García sobre la situación actual que vive España por la pandemia del coronavirus y sobre cómo es posible que con una fiesta se extienda tanto el virus. La experta afirma en Más Vale Tarde que "una de las razones es el concepto de 'número básico de reproducción", que significa a cuántas personas puede contagiar una sola que esté contagiada.

La química y divulgadora científica afirma que "en el coronavirus este número oscila entre dos y seis personas, por lo que una persona puede contagiar a 6 personas y éstas 6 a otras 6", es decir, el aumento de casos es exponencial. Por eso, "con muy pocas personas de inicio, en pocos días puede haber cientos de casos".

Además, Deborah explica que "hay varias razones que afectan especialmente al ocio nocturno y a las discotecas". Y es que, según destaca, en "espacios cerrados con menos ventilación aumenta la capacidad de contagios," y no solo eso sino que "afectan más cosas como la forma en la que las personas se comportan durante la consumición. Es decir, la experta explica que "mucha gente se quita la mascarilla durante toda la noche en la discoteca solo por tener un refresco en la mano".

Deborah también señala como factores de más riesgo, cantar, gritar o respirar de forma agitada, ya que "el virus puede permanecer en el aire más tiempo", algo que, como explica la experta, "se da en una discoteca". Otro de los factores es el consumo de alcohol, y es que destaca que "ya en sí mismo es un riesgo porque la gente se vuelve más temeraria y reduce la percepción del peligro".

Eso sí, preguntada sobre la posibilidad de que la opción del botellón sea mejor que las discotecas, Deborah indica que si al final "estás en la calle y no respetas las medidas de distanciamiento es una situación similar".

"Hemos visto imágenes donde la gente está tan cerca en la calle que el riesgo sigue existiendo", resalta la joven, que insiste en que "cuando estás en un entorno familiar tienes menor percepción de riesgo", por lo que "ahí tenemos que aumentar la guardia". Por eso, surgen más casos en entornos familiares y de amistad "porque nos creemos a salvo", insiste.

Por otro lado, sobre qué medidas nuevas podemos añadir al ocio para mantener alejado el virus, Deborah García señala que "si queremos seguir manteniendo el ocio, una buena solución sería obligar a llevar mascarilla en las terrazas y solo quitarla para beber y, tras el trago, volver a ponerla",

De todas formas, como explica la experta "existen más formas de ocio": "Me parece contradictorio cerrar museos, cines y teatros, donde son mas fáciles de controlar el aforo y las medidas de seguridad, y en cambio el nocturno no se controla tanto". Por eso, Deborah señala que "no es tanto establecer unas medidas sino controlar que se cumplen".

Además, Deborah insiste en que es acertado obligar a usar la mascarilla aun respetando la distancia de seguridad porque esta es muy grande: "Son dos metros y eso es mucho, no nos damos cuenta cuando estamos con amigos que no respetamos la distancia". Por eso, manda un mensaje: "Para proteger a la gente a la que quieres, ponte mascarilla".

"Es esperable la subida de contagios"

Preguntada sobre la subida de contagios, Deborah García declara que era "esperable" ya que "estaba en los modelos de los expertos". "Es natural, sucede porque el virus sigue ahí y seguimos viajando", explica la experta, que señala que "en el día a día hay mucha gente que no usa mascarilla ni respeta la distancia". "Hay muchos fallos y a muchos niveles, no es solo problema del ocio nocturno sino en general", insiste.

Por último, la experta mantiene que "el virus sigue ahí": "No tenemos tratamientos ni vacunas por lo que la situación sigue siendo grave": "Esta situación era previsible, lo que no tiene sentido es cómo hemos llegado hasta aquí". "Las medidas de restricción están llegando tarde cuando ya tenemos un número escandalosos de casos", concluye.