Pablo Ojeda visitó el plató de Más Vale Sábado para hablar de las comidas de Navidad y cómo evitar los excesos que nos provocan malestar corporal. "¿Cómo hacemos para no inflarnos?", le preguntó Adela González, a lo que él respondió tajante: "No hay que llegar con hambre". Y, es que, a pesar de que "todo el mundo" prefiere reservarse para estas comidas y cenas especiales, lo cierto es que el nutricionista no lo recomienda. De hecho, "todo lo contrario, tenemos que llegar saciados".

¿Cómo? Por un lado con "frutos secos", que los tenemos poco calóricos como las castañas, "que son las que menos calorías tienen": "250 calorías por cada 100 gramos", aclaró Pablo Ojeda. O también podemos optar por las nueces, que también son saciantes, aunque tengan más calorías, "unas 750 por cada 100 gramos". "Un puñadito nos va a dar mucha saciedad", recomendó. Pero la cantidad exacta de nueces que tenemos que comer son unas "9 ó 10 nueces".

Otra opción es comer fruta: "Media hora antes comer un plátano o un aguacate con sal". "Entonces cuando me presento en la mesa estoy tranquilo y he saciado la compulsividad del hambre terrorífica", es decir, hay que "comer para quitar el hambre", sentenció, ya que esto nos va a mejorar digestiones y "el vaciado gástrico es menor", por lo que nos permitirá ir mejor al baño.