Los días más oscuros de Gervasio Deferr también tuvo a sus exparejas dentro de esos círculos. Con Jordi Évole, el gimnasta recuerda cómo se "hartó de todo", sabiendo que lo que hacía le podía costar la vida.

Deferr llegó a despertar en la calle, arrepintiéndose de lo que había ocurrido y, pese a todo, que le volviese a pasar. "Tengo una capacidad de esconderme cuando no quiero que me vean", afirma. Sobre sus exparejas, es consciente de haberles "hecho daño" a nivel psicológico. "Por momentos era déspota, imbécil. Es triste. Si no lo recuerdo o verbalizo, es como que no lo supero", agrega con un sorprendido Évole.

Así consiguió Gervasio Deferr no dar positivo por drogas

Gervasio Deferr tenía cinco meses para prepararse para las Olimpiadas de Atenas. Así cuenta en este vídeo cómo consiguió retrasar el control antidoping: "Dije al Comité Olímpico que necesitaba un tiempo para limpiarme".