Mazón ha dicho que Vox no es ni machista ni homófobo, pero hay muchos ejemplos para afirmar lo contrario. Aquí te contamos las pruebas de ese machismo y esa homofobia que, para el presidente de la Comunitat Valenciana, no existe.
Podemos empezar por su cabeza de lista, por el aspirante de la extrema derecha a presidir el Gobierno, porque para Santiago Abascal la violencia de género literalmente no existe. Para él, el término "de género" es una cosa de ideologías.
Vox no lo llama por su nombre. De palabra se justifican diciendo que sí, que ellos están en contra de la violencia machista, pero otra muy distinta son los hechos: Llanos Massó, de Vox, se acaba de estrenar como presidenta de les Corts Valencianes. Todos los grupos de la cámara valenciana guardaron un minuto de silencio por el último asesinato machista en la localidad de Antella, un hombre mató a su mujer delante de su hijo. ¿Quién no está detrás de la pancarta? La ultraderechista Llanós Massó, porque la pancarta dice: "Las Cortes contra la violencia machista".
Massó es presidenta de Les Corts gracias al acuerdo con el PP y porque Vox decidió sacar de la ecuación a su candidato condenado por violencia machista. Pero Vox solo sacó a Carlos Flores de la Generalitat: el condenado a un año por llamar a su exmujer "loca", "imbécil" y "puta" delante de sus hijos, es el número uno por Valencia para las generales.
Vox busca rebajarla la violencia de género allí donde ya están en el poder, llamándola violencia "intrafamiliar". Se empieza por intentar esconder una realidad y se continúa, o esa es su intención tras el 23J, derogando la Ley contra la Violencia de Género, que lleva en vigor desde 2004, cargándose la Ley del Aborto para solo permitirlo en supuestos como violación o malformación y eliminando el Ministerio de Igualdad.
Estos son ejemplos de machismo, pero con la homofobia también hay que empezar por arriba. ¿Para qué reivindicar si uno ya es heterosexual? A lo mejor es que no tienen nada que reivindicar.
Gabriel Le Senne, el nuevo presidente del Parlamento Balear, también gracias al acuerdo con el PP, ha dicho: "El adoctrinamiento LGTBI está elevando los porcentajes de niños homosexuales y trans". Según él, ese "adoctrinamiento" se da "a través de una educación sexual concebida para animar a la promiscuidad prematura".
Y una vez más, lo hemos visto en las comunidades y ayuntamientos donde ya gobiernan. Nada de banderas LGTBI por el día del Orgullo, nada de "trapos arcoíris", como la llamó García-Gallardo.
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Eso es lo que dicen, lo que hacen y lo que proponen para llegar a la Moncloa, porque no solo llevan en su programa derogar la Ley Trans. Vox considera que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer, rechazan la adopción para las parejas homosexuales y quieren eliminar de la sanidad pública las intervenciones de cambio de sexo. Así que, desde luego, hay ejemplos de machismo y homofobia en Vox.
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