Columnas de la historia

La historia de los espías vascos que detuvieron a Mengele, el 'Ángel de la Muerte' de Auschwitz

Los detalles Estos agentes les interesaban a los aliados porque hablaban español, euskera y francés perfectamente y, sobre todo, se movían con gran facilidad por Latinoamérica. Allí es donde operaba Ramón de la Sota, quien se encargaba de vigilar la actividad de los nazis en Argentina e informaba al FBI.

'Alto secreto: los españoles que engañaron a Hitler (1ª parte)'
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El servicio vasco de información fueron quienes detuvieron al doctor Mengele, uno de los criminales de guerra nazi más conocidos. Lo hicieron en los años 40 junto a espías españoles que iban contra Hitler.

Estos espías vascos recibían órdenes desde un edificio en el corazón de Manhattan, la que por entonces era la oficina del Gobierno Vasco en el exilio. Este viernes a las 21:30 horas en laSexta Columna, 'Alto secreto: los españoles que engañaron a Hitler (1ª parte)', se pondrán ver imágenes muy especiales que nos ha cedido la familia del lehendakari Aguirre: es la oficina del Gobierno Vasco en Nueva York.

Aguirre ofreció al servicio del FBI y lo que después sería la CIA toda su red de espías para ayudar a derrocar a Franco. Entraba dentro del guion de la Segunda Guerra Mundial: caería Hitler, caería Mussolini y tenía que caer Franco.

Estos agentes les interesaban a los aliados porque hablaban español, euskera y francés perfectamente y, sobre todo, se movían con gran facilidad por Latinoamérica. Allí es donde operaba Ramón de la Sota, quien se encargaba de vigilar la actividad de los nazis en Argentina e informaba al FBI.

Pero, ¿qué consiguieron estos espías? Algo muy importante, que era la confianza total de la inteligencia aliada. Así se constata en documentos desclasificados a los que ha tenido acceso laSexta Columna, donde el director del FBI elogia a los vascos y dice que están siendo "extremadamente productivos".

Porque también pasaron a la acción. Los espías vascos recibieron encargos de asesinatos y una captura muy especial: llegaron a cazar al doctor Mengele. Y es más, llegaron a fotografiarlo completamente desnudo, desarmado, y enviaron esas fotos a EE UU. Pero misteriosamente una llamada de teléfono les dice que se han equivocado y que tienen que liberarlo inmediatamente. Aun así, estos vascos no desisten y le siguen los pasos hasta Uruguay.

Tras la Segunda Guerra Mundial, tanto a EEUU como a Reino Unido les interesó más destacar la faceta anticomunista de Franco y le acabaron considerando un amigo. Por lo que se rompió la colaboración con los espías vascos y esto, 80 años después de aquello aún produce un profundo dolor en el hijo de Ramón de la Sota.