La casa de Camorritos, vivienda de vacaciones de la familia Koplowitz, es la herencia conflictiva que dejó el empresario al morir. Ahora ya no veranean en la vivienda, según cuentan los vecinos, y se ha puesto en alquiler. Piden 5.000 euros al mes por un chalet de 945 metros cuadrados, 6 habitaciones, 5 baños, dos cocinas y tres plazas de garaje en una parcela junto a un río. En el registro, la propiedad aparece a nombre de las hermanas Koplowitz. Sin embargo, ellas y todos los vecinos de la tranquila urbanización podrían ser desahuciados dentro de poco.

Jaime Suárez, el abogado que lleva cuatro años litigando con los vecinos, explica que el posible desahucio se debe a que las casas en Camorritos "se construyeron al amparo de una concesión administrativa otorgada el 16 de abril de 1920, y es una concesión administrativa que ha caducado por transcurso de los 99 años, que es el plazo legal máximo de duración de estos derechos de concesión.

Por lo tanto, añade el letrado, "desde el momento en que se produjo la caducidad de estas concesiones, que fue en 2019, las construcciones son propiedad del Ayuntamiento de Cercedilla". Así que "tarde o temprano tendrán que abandonarla e indemnizar al Ayuntamiento de Cercedilla por estas ocupaciones ilegales". "Están haciendo una ocupación que entendemos que es ilegal en esos terrenos", argumenta.

Preguntado si se puede alquilar, asegura que sí, pero que "otra cosa son las consecuencias jurídicas y económicas que tenga ese alquiler". "Esos ingresos se le están quitando al Ayuntamiento de Cercedilla, que es el que legalmente debería tener la posesión de esas casas desde hace ya cuatro años y el que legalmente debería poder sacar al mercado nuevas concesiones y obtener ingresos por ella", sostiene el abogado. Al conocer que han puesto la casa en un portal de alquiler, ha evitado hablar, señalando que él no puede "alegar a temas particulares". "Tenemos que ser muy respetuosos con todo ello".