Tras la reciente reapertura del caso de la desaparición de Yéremi Vargas, Equipo de Investigación analiza este viernes a las 22:30 horas las nuevas pistas que podrían esclarecer el caso.

El color de unas gafas, y una afección pulmonar son las dos pistas claves para la reapertura del caso. 15 años después de la desaparición del menor de 7 años, el mismo juez que archivó el caso ha llamado a declarar este viernes a la madre del pequeño, a un funcionario de prisiones y a un testigo del suceso. Esta semana Equipo de Investigación analiza en 'Yéremi, caso abierto' las nuevas pistas aportadas por el abogado de la familia para esclarecer de una vez, qué pasó realmente con el pequeño y quién fue el culpable.

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Yéremi Vargas, extraña desaparición en 2007

Yéremi Vargas desapareció hace más de 14 años mientras jugaba con sus primos en los alrededores de su casa en Vecindario, un núcleo urbano perteneciente a Santa Lucía de Tirajana, en Gran Canaria. El pequeño tenía entonces siete años y padecía insuficiencia respiratoria y precisaba de medicación.

Desde ese día, el 10 de marzo de 2007, un amplio dispositivo de más de 400 personas se puso manos a la obra para buscar al pequeño. Efectivos de la Guardia Civil, Protección Civil, Policía Local se volcaron en el rastreo de la zona para dar con él. Una búsqueda que no dio sus frutos y es que a día de hoy no se sabe de su paradero.

El primer detenido resultó ser un estafador

No fue hasta el 19 de marzo cuando la Guardia Civil detuvo a un hombre de 27 años acusado de un delito de extorsión a la familia de Yéremi: había pedido a sus padres 6.000 euros a cambio de liberar al pequeño, pero la investigación concluyó que era un engaño para conseguir dinero.

Ese mismo año también fue detenido otro hombre que intentó raptar a una niña de 11 años en una calle del mismo pueblo que Yéremi. Este delincuente fue condenado a seis años de cárcel por esos hechos, pero no se pudo probar que estuviera involucrado en la desaparición de Yéremi.

Las principales líneas de investigación que barajó la Guardia Civil siempre fueron la posibilidad de que fuera secuestrado por algún pederasta de la zona. También se barajó el tráfico de seres humanos e incluso el tráfico de órganos. Por ello se investigaron hasta 195 personas involucradas en casos similares. Todo sin éxito.

Se investigó al culpable del caso kárate

Ya en el año 2010, se destapó el conocido caso kárate, en el que el excampeón nacional de este deporte y responsable de una academia en Gran Canaria fue condenado a 302 años de cárcel por pederastia. Los investigadores registraron su vivienda en busca de pistas de Yéremi, pero no hallaron nada concluyente. De hecho, la jueza del caso rechazó excavar en el jardín de esa casa.

En el año 2014 el entonces ministro de Interior, Fernández Díaz, llegó a asegurar que existían líneas de investigación "bastante buenas" sobre la desaparición de Yéremi, y en 2015 se investigó un cráneo encontrado en Gran Canaria que no resultó ser del pequeño.

Antonio Ojeda 'El Rubio', en el punto de mira

El 2016 es clave en la cronología del caso. Ese año se localizó a Antonio Ojeda 'El Rubio', un sospechoso que se encontraba cumpliendo condena en la cárcel de Algeciras por haber violado a un menor en 2012. Las coincidencias eran claras ya que este hombre residía a solo 50 metros de la casa de Yéremi cuando desapareció.

Tras estas nuevas pistas, un compañero de celda de Ojeda aseguró que le había confesado que el culpable de la desaparición de Yéremi era un vecino llamado El Tani con la siguiente frase: "Lo que pasa es que tuve la mala suerte de ver lo que ocurrió. Lo hizo otro, un vecino mío, un desgraciado que se llama El Tani".

No fue el único compañero de la prisión que reveló los comentarios de El Rubio. Otro explicó que le había confesado que el caso de Yéremi se fue de las manos y tuvo que hacerlo desaparecer. A pesar de estas declaraciones, el juez no vio indicios suficientes para incriminarle y archivó el caso.

Se reabre el caso de Yéremi Vargas

Tras una solicitud por parte del abogado de la familia de Yéremi, el juez ordenó la reapertura del caso el pasado septiembre, 14 años después de la desaparición.

La familia vuelve a apuntar a Antonio Ojeda como responsable del crimen y basa su acusación en dos flecos que quedaron sueltos y que este viernes analizará Equipo de Investigación: el color de unas gafas y una afección pulmonar del pequeño.

En la solicitud de reapertura, la familia destaca las declaraciones que hizo la expareja de Antonio Ojeda asegurando que éste le dijo que el color de las gafas del pequeño eran diferentes a las que llevaba en las fotos difundidas y cuyo color no había sido revelado.