En los últimos cinco años, las marcas de lujo han subido sus precios un 20%. Actores, deportistas, modelos y hasta algún presidente se fotografían con relojes que valen como un piso.

Es el caso, por ejemplo, de Guardiola, quien se fotografió con un A. Lange & Söhne valorado en 125.000 euros; o el de Cristiano Ronaldo, quien lo hizo con un Jacob & Co de 700.000 euros. Algunos son tan exclusivos, que los compradores tienen que apuntarse en una lista de espera para conseguirlos. Además, hemos visto a Joe Biden con un Rolex de 62.000 euros, a Messi con un Audemars Piguet de 99.000 euros, o a Sergio Ramos con un Patek Philippe de 38.000 euros, entre otros.