Carlos Koplowitz, hijo del empresario Ernesto Koplowitz y Albertina Rangel, se traslada con el equipo de Equipo de Investigación a Suiza para relatar cómo fue su vida y la de su madre en este país. La amante trabajaba en un hospital pelando patatas y su hijo estudiaba en un colegio exclusivo del país helvético.
"Mi madre tenía que buscarse la vida ella misma y encontró como trabajo pelar patatas en un hospital en Suiza, que fue muy duro, porque ella nunca había hecho ese trabajo", recuerda Carlos. Pero "era el precio que tenía que pagar para poder quedarse en Suiza", cuenta de camino al internado donde estudió.
Pese a la vida de su madre, Carlos Koplowitz estudió y lo hizo en uno de los mejores internados suizos. Se educó en un colegio internacional fundado en 1910, un prestigioso centro con pistas deportivas, piscina y laboratorio, pero donde nadie sabía que aquel alumno, Carlos Iglesias, era, en realidad, el hijo bastardo de un importante empresario.
La exdirectora asegura que en este internado estudiaron las hijas de Agnelli, el de Fiat; el hijo de Audrey Hepburn, Luca; y el hijo del expresidente del Gobierno de Colombia, Álvaro Uribe Vélez. "Es un colegio muy exclusivo y muy particular. Muchos deportes, muchas excursiones importantes al Kilimanjaro", explica la exdirectora. Estudiar ahí costaba en 1972 unos "45.000 o 50.000 francos" al año, una cantidad que era "mucha" para la época. En la actualidad, cuesta 150.000 euros anuales.
Se encargaba de personas mayores y discapacitados
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La Policía investigó a Rogelio, subdirector del banco, por ser la última persona que vio con vida a Ana María y Antonio y descubrió que se dedicaba a estafar a personas mayores y discapacitados. Entre ellos estaba el matrimonio, a quien robó 78.000 euros.