El Jefe infiltrado de 'Regalo Original' arranca su jornada en el departamento de Producción con Nando, un trabajador muy perfeccionista.

Los eficientes métodos de este empleado sorprenden a Eduardo, pero esta buena impresión se ve truncada por un accidente al final del día.

Nando y el jefe cortan un ramo de rosas sin guantes ni las medidas de seguridad necesarias, lo que hace que Eduardo sufra un corte.

"Si te cortas y empiezas a sangrar lo suyo es curarte y seguir", le dice El Jefe infiltrado al trabajador, a lo que este contesta: "Eres un poco blando, no tenemos tiempo para estas niñerías".

Nada más empezar el programa, El Jefe infiltrado sufre una gran transformación que le deja muy sorprendido: "Esta pinta no la he tenido yo en la vida".

Además, El Jefe infiltrado pierde "los nervios" con un trabajador del departamento de Customización que tiene varios fallos a lo largo de la jornada: "Aburre a las cabras, no sabe lo que tiene que hacer".

Por otro lado, el rifirrafe entre dos trabajadores, en el que se lanzan hasta varios 'dardos', deja alucinado a El Jefe infiltrado: "No me ignores, has perdido una venta"

En su cuarta jornada de trabajo, El Jefe infiltrado acompaña a Carlos, un repartidor de 'Regalo Original' que se encarga de distribuir los paquetes. En un momento dado, Carlos se equivoca y le canta el 'Cumpleaños Feliz' a la persona que no es: "Ha habido un error".

Por último, llega el día de las revelaciones, donde El Jefe infiltrado descubre a sus trabajadores su verdadera identidad. Incluso, muestra a Adrián su carta de despido: "Hay fallos imperdonables".