Isaac Cabello, director financiero del grupo Cooltra, se somete a un cambio de estilismo para poder infiltrarse en la empresa. Su mayor miedo es acabar con el pelo rapado a cero o con rastas.

A la estilista de El Jefe infiltrado no le tiembla el pulso y le pasa la maquinilla a Isaac. "Veo que falta pelo por arriba, me veo viejo. ¡Joder, vaya!", exclama al descubrir ante el espejo su nuevo look.

Su nueva imagen, ya convertido en Paco Ripoll, impacta a su familia. "Yo lo veo por la calle y dudo si es mi hijo", afirma la madre de Isaac. "Tiene un aspecto de militar", añade el padre.

Otros momentos destacados

Ya convertido en Paco Ripoll, el jefe infiltrado vivió la grave infracción de Mario en su cara. "Está prohibido, parece que le pagamos por fumar", dejaba claro el Jefe.

Y con Mario, nada más empezar la jornada laboral descubrió por qué no cumple las cifras. El trabajador hace su primera parada para tomar un café y un bollo. "Luego también me hago los 20-30 minutos de descanso a media mañana. Creo que me lo merezco y me lo tomo con calma", le explica al Jefe infiltrado.