Solo diez de las 50 universidades públicas españolas están dirigidas por mujeres. Pilar Aranda es una de ellas. La rectora de la Universidad de Granada ha explicado algunos de los motivos: "Para ser rectora hay que ser catedrática, por lo que si partimos de una proporción tan baja para las mujeres hay menos posibilidades".

Además, dice, "hay que procurar que haya mujeres que participen de la vida académica, y que se conozca". Otro de los problemas principales es la conciliación, sobre todo hasta hace pocos años. En el vídeo principal de esta noticia analiza la situación de la mujer en las aulas académicas.

Desde que comenzó a estudiar hasta ahora, ha explicado en su entrevista, la realidad académica no ha dejado de cambiar: "Aquella universidad del post-franquismo era una universidad comprometida con la idea de socializar, de que todo el mundo pudiera ir a la universidad. El incremento de personas que pueden acceder a los estudios universitarios es increíble". Sin embargo, continúa la desigualdad. Puedes verlo en este vídeo: