En los apenas 50 kilómetros que separan un melonar de Villaconejos y una frutería del centro de Madrid, el precio de un melónse multiplica por cinco. Andrea Ropero ha intentado averiguar el por qué de este tremendo incremento y ha hablado con José Carlos Velasco, un agricultor que ha dedicado los últimos 42 años de su vida al cultivo de melones.

Andrea le ha mostrado un melón que ha comprado en una frutería de Madrid que le ha costado 2 euros el kilo: "Ese melón se está vendiendo aquí por unos 35 céntimos el kilo", comenta este hombre que ha visto muy reducido su margen de beneficio por la subida de los abonos nitrogenados, el gasóleo o los plásticos.

"Con estos precios es que cojas una semana buena y digas 'he cubierto gastos, ya estoy salvado'", comenta José Carlos, para el que hay muchos intermediarios: "Son mucha gente por medio, es un sistema que no es el correcto". La entrevista al completo, donde también asegura que "me he planteado decir 'se ha terminado ya'", en el vídeo sobre estas líneas.