El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha cargado este viernes en una entrevista en Al Rojo Vivo contra el presidente de la Xunta de Galicia, el 'popular' Alfonso Rueda, asegurando que ha convertido el vertido de los pellets de plástico en una "crisis política que le sobrepasa". "Este señor no da la talla, ha escondido la cabeza y ha repartido culpas", ha señalado, subiendo el tono contra Rueda por sus críticas al Gobierno y a su ministerio.

El presidente de la Xunta ha asegurado este jueves que el Gobierno está mareando a los ciudadanos con su gestión sobre el vertido de pellets y ha cargado tanto contra la ministra para la Transición Ecológico, Teresa Ribera, como contra el mismo Puente, a quien ha pedido "menos Twitter y más eficacia". A esto, el ministro ha contestado que no entiende por qué están "obsesionados con su Twitter" y ha aclarado que él hizo "declaraciones, no tuit".

A renglón seguido, Puente ha asegurado que el ministerio y su Gobierno "no están mareando a nadie" y quien lo hace es Rueda al "decir que no tenían información, cuando la tenían, como mínimo, el día 13" de diciembre que "es cuando se detectan los pellets en la costa". También ha resaltado la contradicción de la Xunta sobre buscar o no en el mar, al recordar que el conselleiro do Mar, Alfonso Villares, aseguró que "no hay que ir al mar" y "después dice que hay que ir al mar". Asimismo, ha subrayado que primero dijeron que no había que elevar la alerta al nivel 2 y un día después la elevaron.

En resumen, ha sostenido que, "en todo caso, quien marea es el señor Rueda". "Quizás esté excediendo aquí como miembro del Gobierno, pero en mi opinión lo que ha puesto de manifiesto esta crisis es que este señor no da la talla. Esa es la realidad", ha cargado. Y ha añadido que "hasta ahora estaba tapadito con su gestión diaria y como era el sucesor estaba ahí" y que "esta crisis es la que pone en su justa medida la dimensión de los políticos": "Y la del Señor Rueda es muy escasa".

Por eso, el ministro ha asegurado que el presidente de la Xunta tenía una gestión que hacer y la podría haber desarrollado con "un perfil bajo", buscando "la colaboración y la cooperación". Sin embargo, añade, que lo que ha hecho es, por un lado, "esconder la cabeza" y, por el otro, "repartir culpa a las Administraciones que no tenían ninguna intención de hacer casus bellis ni de hacer de esto una cuestión política, y le habían informado lealmente de lo que estaban descubriendo. "Él ha convertido esta crisis en una crisis política que le sobrepasa completamente", ha zanjado.