El pleno del Ayuntamiento de Burgos, con sólo los votos del Partido Popular, ha aprobado seguir con las obras del bulevar de Gamonal. UPyD y PP han aprobado una condena de los actos vandálicos de estos últimos días. El PSOE insiste en que se trata de un acto social cívico, y que quien no lo quiere ver "tiene un problema".

Javier Aroca sostiene que esta decisión es una "torpeza política" del alcalde de Burgos y del delegado del Gobierno. "Este movimiento trasciende la mera rebeldía ante la obra que se está construyendo. Yo creo que esconde una frustración ciudadana", explica. Aroca cree que los políticos son incapaces de detectar cuando la ciudadanía tiene motivos para protestar.

"El alcalde, con sus actos, ha convertido la protesta en un acto de rebeldía de un barrio entero. La protesta muestra la desconexión existente en los ciudadanos y los representantes políticos", insiste Aroca.

El antropólogo se pregunta por qué los ayuntamientos hacen este tipo de obras: por interés ciudadano o por interés propio. "Comprendo el 'mal olor' que desprende toda esta situación y cómo los ciudadanos de Burgos lo han detectado de forma inmediata". Alfonso Rojo, por su parte, cree que no es el momento de una obra así en el barrio Gamonal. "Estoy a favor de la obra pública, pero cuando toca".