Esta ilusión quedó finalista del concurso de ilusiones ópticas que organiza cada año Susana Martínez-Conde, directora del Laboratorio de Neurociencia Integrativa en la Universidad del Estado de Nueva York. Fue creado en 2006 por Anthony Norcia.

La ilusión juega con las señales de segmentación de los rectángulos y las sombras, dándole sensación de profundidad, por lo que parece que las figuras están en 3D. Si todavía no has conseguido verlo, el truco está en fijar la vista en el centro de la imagen, y no de forma general.

El psicólogo Akiyoshi Kitaoka ha compartido en Twitter una ilusión similar a la del cofre, pero mucho más simplificada, obra de Rikio Sugano, profesor de la Universidad Takachiho de Tokio, en la que se combinan rectángulos y diamantes, donde es mucho más fácil distinguir la figuras.