Xesús ha hablado sobre sus primeras impresiones al llegar al punto donde se produjo el accidente que "lo primero que te encuentras es una imagen insólita y no acabas de creerte lo que está pasando".

En todo momento ha mostrado su agradecimiento a los vecinos de la zona, circunstancia con la que "te quedas sobre cogido porque ves a los vecinos en las vías, intentando arrancar los cristales de los vagones y sacar a las víctimas".

A la pregunta de si podría haber más víctimas en estos momentos si no hubiera sido por la ayuda de los vecinos, Xesús Martínez ha contestado que "eso nunca se puede saber, pero esa ayuda inicial fue imprescindible". También destacó en este aspecto que parte de los vecinos se vieron frustrados cuando los cuerpos de seguridad acordonaron la zona".

"Los primeros minutos son un pequeño caos, los propios bomberos queremos hacer todo a la vez, pero no es posible", explicaba el sargento del parque de bomberos de Santiago de Compostela. En la manera de trabajar, "las primeras horas no te imposta estar trabajando, no te cansas, pero cuando pasa el caos se hacen grupos de trabajo para descansar".

Otro de los temas a los que ha contestado es referido a la huelga de bomberos que decidieron aparcar por el momento dado que tenían que estar ayudando en las labores de rescate, "es algo digno que hay que tener en cuenta la respuesta que dio un colectivo que estaba en conflicto en plena huelga".

Por último ha destacado que "son muchas las imágenes que se quedan en la mente, y lo que quieres es no recordarlas, aunque eso llevara un tiempo a los profesionales y vecinos".