10.000 trabajadores del Sistema Nacional de Salud han perdido sus trabajos sólo en la primera mitad del año. Es casi la misma cantidad de los que se perdieron en todo el año pasado.
Frente al mostrador de urgencias, a la vista de todo el mundo, sufren su enfermedad mientras algún familiar les consuela. No es una epidemia, ni un brote, ni un pico de urgencias. Es lo normal, según los sindicatos. Hasta en su planilla cuentan con estos espacios.
La situación se agrava cuando nos enseñan que sobre sus cabezas, en la planta de arriba, hay camas vacías. Hay plantas cerradas en el hospital, o sea que se podrían abrir las camas, contratando personal y descongestionando el servicio de urgencias.
El hospital asegura que en estos momentos las urgencias funcionan con normalidad. La clave está en el personal. Sólo en los seis primeros meses de 2013, la sanidad madrileña ha perdido 2.800 trabajadores.
En toda España 10.000, eso se traduce en plantas enteras cerradas, como estas del hospital de Getafe, mientras los pasillos se colapsan.
“Es lo que nosotros llamamos privatización encubierta. Lo que están haciendo es reducir la actividad de los centros públicos, eso hace que a igual demanda sanitaria, lo que están haciendo es derivar pacientes a las empresas privadas”, declara una trabajadora del hospital.
Por eso los ciudadanos se movilizan. En Murcia firman para que el hospital del Rosell no se convierta en un centro ambulatorio. Los fallecimientos en Catalunya han aumentado un 5% sin ninguna epidemia ni brote destacado.
Desapareció el 10 de marzo de 2007
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Tras 17 años de búsqueda A pesar de la insistencia de la madre, el caso sigue sin resolverse, a pesar de la reapertura de la investigación en 2021 y el testimonio de un niño que asegura haber visto a Yeremi entrar en un vehículo blanco.