El primer testigo que reconoce que Morate le confesó el
crimen es la mujer de Itsvan, uno de los amigos del presunto asesino que le
acogieron en Rumanía durante su huida: "Nos dijo que había matado a Marina".
Ha asegurado que a raíz de esta confesión se enteró a través
de Internet del doble crimen de Marina y Laura. Sin embargo, nunca llegaron a
avisar a la Policía porque justo al día siguiente la Interpol irrumpió en su
vivienda y les detuvo a los tres.
Su declaración fue seguida por Morate con muchísima
atención. Quien no ha acudido a declarar es Itsvan, que en su día reconoció
también que Morate le confesó el crimen, algo que hizo incluso ante los medios
de comunicación.
Pero en sus declaraciones posteriores lo negó, como en la
grabación que han reproducido durante el juicio, en la que se escucha: "No,
no es cierto. No me acuerdo de nada de eso".
"La mujer dice que reconoció que mató a Marina y que no le
dieron importancia, parece que tomaron una cervecita y dijo 'oye he matado a
Marina'", asegura con indignación la hermana de la víctima.
Los momentos duros a la entrada de Morate se siguen reproduciendo, y es que es el único momento en el que los familiares de los fallecidos pueden desahogarse.