Había que madrugar para poder ver que la marea del siglo estaba a punto de convertir el Mont Saint-Michel en Normandía, en una isla, y nadie quería perderse detalle. Un pequeño pueblo en la baja Normandía se ha llenado de turistas que miraban expectantes el poder del agua.
Pasarán 18 años para poder ver algo igual otra vez. El mar ha intentado tocar el cielo elevándose hasta casi 5 metros. “Todo Saint-Michel cubierto por el agua nunca lo había visto así”, cuenta un joven.
En España la subida de marea también se ha notado. En la playa de la Concha en San Sebastián bañada por el cantábrico y también se ha quedado con el suelo del mar al descubierto. Muchos curiosos han sido puntuales a la cita. “Era la hora y hemos venido a ver si se podía llegar andando a la isla pero no se puede”, cuenta un hombre curioso.
El agua ha descendido una media de 4,91 metros pero no es suficiente para llegar hasta Santa Clara ya que hay más de 1.000 metros de distancia. Habrá que esperar otros 18 años para poder inmortalizar ese sorprendente paseo.