Presuntamente mató a su pareja en una casa de Córdoba porque no podía soportar más las violaciones, y convivió durante cuatro meses con el cadáver en la vivienda. Según explicó a la Policía, lo hizo porque estaba harta de violaciones: "Lo que he hecho lo volvería a hacer. No tuve más remedio que intentar sobrevivir. Había días que me violaba hasta cinco veces".

Una convivencia complicada que ya tenía antecedentes, ya que la víctima tenía una orden de alejamiento sobre ella de la que había quedado absuelto porque ella no se presentó en el juicio. "No me dejaba vivir, me maltrataba, me controlaba. Yo le perdonaba una y otra vez pero siempre volvían los palos, por eso lo maté", declaró.

La mujer ya ha ingresado en prisión, y ahora queda por determinar el maltrato que asegura que sufrió durante años, ya que "si se demuestra que ha habido legítima defensa, supondría que no es condenada por ningún tipo de delito o una eximente incompleta que le rebajaría la pena uno o dos grados", explica la abogada Olatz Alberdi.

La Policía encontró el cuerpo de un hombre momificado en el sótano de la casa deshabitada después de que el olor alertara a los vecinos. Ella había convivido con él cuatro meses y según la autopsia, la víctima murió después de recibir varias puñaladas. Ella lo hizo porque asegura que era la única forma de sobrevivir.