El Ayuntamiento de Madrid ha ordenado a tres empresas que operan en la capital que retiren todos los patinetes eléctricos porque no cumplen los requisitos que exige la nueva ordenanza municipal. El consistorio les ha dado un plazo de 72 horas para su retirada.

Una de las tres empresas que tendrá que retirar sus patinetes es Lime, que actualmente tiene una de las mayores flotas de estos vehículos. Las otras dos son Voi y Windy.

Las razones que argumenta el Ayuntamiento que dirige Manuela Carmena son que Lime no ha entregado la documentación electrónica dentro del plazo requerido. Además, apunta que las tres empresas sancionadas permiten a los usuarios comenzar y terminar su viaje en zonas en las que no se debe circular con patinete, debido a la nueva ordenanza de movilidad.

No obstante, una vez que cumplan las condiciones, las tres empresas podrán volver a operar en las calles de la capital.

El Ayuntamiento de Madrid quiere asegurar un "reparto equilibrado" de estos patinetes por la ciudad, evitar la saturación de zonas y garantizar las condiciones de seguridad vial y peatonal.

Entre otros requisitos, las empresas deben tener seguro, adecuar sus aplicaciones a las zonas transitables en patinete eléctrico y garantizar la interoperabilidad de sus sistemas informáticos de localización de los patinetes con los del ayuntamiento para que se pueda comprobar el número y la ubicación de sus patinetes conforme a la autorización otorgada.

Según la Ordenanza de Movilidad Sostenible, en vigor desde el 24 de octubre pasado, los patinetes eléctricos, que tienen prohibido ir por la acera, pueden circular por carriles bici y por calles a 30 kilómetros por hora a lo largo de un 85% de las vías de Madrid, fundamentalmente aquellas de un carril por sentido o un solo carril.