Greenpeace denuncia con una pancarta de 126 metros desplegada en el Viaducto de la calle Bailén de Madrid, la detención del barco "Arctic Sunrise" por parte del Ministerio de Fomento tras una actuación de la Armada que califica de "violenta", y en la que resultaron heridos tres activistas de la organización.

"Cada día que el 'Arctic Sunrise' está detenido -ha explicado Mario Rodríguez, director de Greenpeace- es un día menos que no está defendiendo el medio ambiente, y por ello hemos reunido el dinero para liberarlo, gracias al apoyo de socios y simpatizantes".

La organización ecologista ha decidido depositar los 50.000 euros de aval para permitir que el barco siga navegando en defensa del medio ambiente. Para Greenpeace, el Ministerio de Fomento "pretende dilatar el proceso en una maraña burocrática que puede durar semanas o meses".

"Tardan pocos días en ponernos multas cuantiosas, y en cambio meses en reconocer que tanto el aval como la multa son desproporcionados", se ha quejado. Dentro de una semana, ha recordado la organización, "comienza el juicio más duro al que se enfrenta Greenpeace en sus 30 años de activismo pacífico en España". No obstante, ha asegurado Mario Rodríguez, la organización ecologista volverá a decir "alto y claro" que no les callarán, "ni con fianzas desproporcionadas, ni con embestidas de lanchas, ni con amenazas de cárcel".