Polémica en el avión
Francia pide explicaciones a Vueling tras la expulsión de un vuelo de 50 adolescentes judíos: "Queremos que se aclare este incidente"
El contexto El ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, quiere determinar si los jóvenes, de nacionalidad francesa, fueron discriminados por su religión. La compañía aérea dijo desde el principio que fueron expulsados del pasaje, que iba de Valencia a París, por mostrarse "conflictivos".

Resumen IA supervisado
La controversia sobre la expulsión de 50 adolescentes judíos de un vuelo de Vueling entre Valencia y París sigue en aumento. El Gobierno francés exige explicaciones a la aerolínea, sospechando discriminación religiosa, mientras que Vueling alega que los jóvenes fueron expulsados por comportamiento conflictivo y manipulación del material de emergencia. El ministro francés Jean-Noël Barrot expresó su consternación a la consejera delegada de Vueling, Carolina Martinoli, y solicita una investigación exhaustiva. Por su parte, el ministro israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, acusa a la tripulación de actuar por motivos antisemitas. Vueling y la Guardia Civil niegan cualquier motivación religiosa, insistiendo en que las acciones del grupo comprometieron la seguridad del vuelo. La Liga Internacional Contra el Racismo y el Antisemitismo criticó al ministro español de Transportes por comentarios inapropiados sobre el incidente.
* Resumen supervisado por periodistas.
La polémica por el vuelo entre Valencia y París en el que 50 adolescentes judíos fueron expulsados no cesa. Si este viernes se daba a conocer que el capitán que ordenó la expulsión del avión de Vueling fue instructor de los terroristas del 11S, ahora el Gobierno de Francia no ha dudado en pedir explicaciones a la compañía. Quieren saber si todo vino dado por un odio a su religión.
Aunque Vueling ha sido clara desde el principio: los jóvenes y sus monitores fueron expulsados por mostrarse "conflictivos" y manipular el material de emergencias de la aeronave. Opiniones enfrentadas que no son suficientes para el ministro francés de Exteriores, Jean-Noël Barrot, que ya ha mantenido una conversación con la consejera delegada de la compañía aérea, Carolina Martinoli, para saber si el grupo de adolescentes franceses sufrieron discriminación.
A través de una llamada este viernes, Barrot, manifestó a Martinoli la "profunda consternación" que le causó conocer el desembarque del grupo de adolescentes y monitores (52 personas) que el pasado miércoles fueron sacados de una aeronave de Vueling en el aeropuerto de Valencia, donde iban a despegar con rumbo a París-Orly.
"Se solicitaron explicaciones, en particular para determinar si estos compatriotas habían sido objeto de discriminación por motivos religiosos", indicó este sábado una declaración del portavoz del ministerio francés de Exteriores. La misma gestión se realizó "ante el embajador de España en Francia", agregó. Martinoli aseguró a Barrot que se está llevando a cabo "una rigurosa investigación interna y que las conclusiones de dicha investigación se compartirían con las autoridades francesas y españolas".
Además, el ministro delegado (cargo equivalente a secretario de Estado) de Asuntos Europeos, Benjamin Haddad, señaló que había hablado con el director de la asociación de colonias de vacaciones con la que viajaban los jóvenes para decirle que le habían "impactado las imágenes del desembarco". "He pedido a mi homólogo español que se aclare por completo este incidente que ha afectado a jóvenes franceses de confesión judía", añadió Haddad en un mensaje en X.
Vueling indicó el pasado jueves que los jóvenes, que retornaban de una colonia de verano, mostraron un "comportamiento conflictivo" que ponía "en riesgo el desarrollo seguro del vuelo". El comandante informó a las autoridades de que los miembros de ese grupo estaban manipulando de forma reiterada el material de emergencia e interrumpiendo activamente la demostración de seguridad realizada por la tripulación de cabina.
Tras varios intentos de intervención por parte de los miembros de la tripulación y también del copiloto, los pasajeros se negaron a cesar en su conducta, por lo que se decidió su desembarque. Vueling explicó que, según sus procedimientos, solicitó "la intervención de la Guardia Civil, que, tras evaluar la situación, procedió al desembarque del grupo para priorizar la seguridad del resto de pasajeros", indica.
Una monitora "reducida y esposada"
Una vez en la terminal, el comportamiento del grupo continuó siendo agresivo e incluso "algunos individuos mostraron una actitud violenta frente a las autoridades", añadió la aerolínea española. La responsable de los monitores llegó incluso a empujar y arremeter contra un agente de la Guardia Civil, por lo que fue reducida y esposada.
A raíz de estos acontecimientos, se instruyeron diligencias por un delito contra el orden público de resistencia y desobediencia a agente de la autoridad, que se remitieron a la autoridad judicial, así como una denuncia por alteración de la seguridad aérea. Veintitrés de los menores y dos monitores fueron reubicados en un vuelo de otra compañía y el resto pernoctó en un hotel y viajó al día siguiente.
Canciones hebreas antes del despegue
La compañía rechazó "de forma rotunda cualquier afirmación que relacione la decisión" de su tripulación con "la expresión religiosa de los pasajeros involucrados". También la Guardia Civil rechazó cualquier tipo de motivación religiosa en lo sucedido, dado que en ningún momento de su actuación los agentes tuvieron conocimiento de la confesión religiosa de las personas desembarcadas, aseguraron a EFE fuentes de ese cuerpo.
El ministro israelí de la Diáspora y Lucha contra el Antisemitismo, Amichai Chikli, aseguró que los jóvenes se limitaron a cantar canciones hebreas antes del despegue y que la tripulación desalojó por este motivo al grupo mientras acusaba a Israel de ser un "estado terrorista", algo negado de forma tajante por la aerolínea.
Por otra parte, la Liga Internacional Contra el Racismo y el Antisemitismo (Licra, con sede en París y fundada en 1929) criticó este sábado al ministro español de Transportes, Óscar Puente, por haber definido a los miembros del grupo, todos de nacionalidad francesa, como "niñatos israelíes" en un mensaje en redes sociales. "El odio antiisraelí y antisemita no tiene fronteras", señaló Licra en un mensaje en X.
Se les desembarcó "para proteger al resto de pasajeros"
Por su parte, Vueling ha publicado una nota en la que informa de que el grupo "manipuló de forma indebida el material de emergencia e interrumpió activamente la demostración obligatoria de seguridad, omitiendo reiteradamente las instrucciones del personal de cabina".
"A pesar de los múltiples avisos, esa conducta inapropiada persistió y obligó a activar los protocolos de seguridad para proceder al desembarco del grupo y proteger al resto de pasajeros", expresa la aerolínea.
En ese sentido, el Colegio Oficial de Pilotos ha insistido en que el comandante es la máxima autoridad de un vuelo y bajo su seguridad recae la seguridad de la aeronave, las personas y la carga a bordo.
Por tanto y ante cualquier circunstancia que pueda comprometer la seguridad de la operación, "el comandante adopta las decisiones oportunas en base a su criterio profesional y de acuerdo a la normativa aeronáutica y los procedimientos recogidos en los manuales de operaciones de las compañías".