La Fiscalía de Cantabria ha abierto una investigación y ha ordenado la práctica de diligencias tras recibir una denuncia por el suministro de un producto crecepelo a varios bebés en lugar del tratamiento para el reflujo que padecían.

Fue a finales de julio cuando se conoció que las familias de cuatro niños afectados, todos ellos menores de un año, habían presentado una denuncia penal en los juzgados.

Esa denuncia se dirige contra un laboratorio, empresas importadoras y distribuidoras de medicamentos y dos farmacias por fabricar, distribuir y vender un producto crecepelo que se les suministró por error a estos menores.

Los niños fueron diagnosticados de reflujo gastroesofágico en el centro de salud de Los Corrales de Buelna, donde les prescribieron una fórmula magistral elaborada con Omeprazol, que ingirieron durante varios días.

Ese preparado que se suministró a los menores fue elaborado en una farmacia de Los Corrales de Buelna y también en otra de Santander.

Los padres se alertaron por la aparición de vello en los menores, sobre todo en la zona facial, y desde el centro de salud se dio comunicación al Servicio de Farmacovigilancia de Cantabria.

La reacción adversa se notificó a la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios el pasado 12 de junio, que ordenó la retirada del producto del mercado. Como medidas cautelares, se decidió retirar del mercado todas las unidades distribuidas del lote afectado y que se realizara un seguimiento.