Doce años después, el caso sigue abierto en la Audiencia Nacional y el juez instructor, Santiago Pedraz, ha pedido ayuda internacional, en concreto a la red europea Genocide Network, "ante la falta de asistencia judicial por parte de Estados Unidos para juzgar a los responsables de la muerte de Couso", según ha afirmado la Asociación de Hermanos, Amigos y Compañeros de José Couso.

El magistrado se acoge, así, a la IV Convención de Ginebra y recuerda la obligación de investigar los crímenes cometidos contra objetivos civiles en cualquier lugar del mundo.

Couso falleció la mañana del 8 de abril del 2003 en Bagdad, cuando el hotel Palestina, lugar en el que se alojaban más de 200 periodistas, fue atacado por el ejército norteamericano, tres informadores perdieron la vida y varios resultaron heridos.

La asociación ha subrayado que "ningún responsable ha sido juzgado" y que "esta es la única causa abierta en el mundo contra militares estadounidenses" en la que cinco están imputados: sobre tres de ellos pesa una orden de detención, mientras que para los dos restantes la familia de Couso está a la espera de que el juez resuelva la petición de detención solicitada por la acusación ejercida.