Mariangela Gotsinou está en las nubes. Tiene 58 años y aplicó esta semana para un trabajo nuevo. "Me han hecho una entrevista sin necesidad de saber mi edad", asegura. Porque a pesar de hablar tres idiomas, le han dicho que no muchas veces: "Sientes como que en algo has fallado". Por primera vez en la historia se contabilizan 1.617.200 mujeres mayores de 55 años trabajando.

Según las conclusiones a las que ha llegado una empresa de trabajo temporal basadas en sus candidatos. "Hay percepciones de que las personas mayores de 55 años están desactualizadas, pero estamos viendo que eso no es así", asegura Delia Salinero, consultora de ADECCO.

Otro ejemplo es Manoli, que es recepcionista. No le fue fácil conseguir un empleo después de los 50. "En cuanto ven tu fecha de nacimiento ya te hacen la primera selección", apunta. Por esta razón, ella no paraba de preguntarse "qué ocurría para que a las mujeres mayores no diesen esa oportunidad".

Así se cumplen más de tres décadas desde la primera oleada de incorporación femenina en el mercado laboral. Asimismo, la crisis del 2008 propició una segunda oleada para sacar a flote la economía familiar: "Mi generación es poderosa", sostiene Mariangela.

Una generación que pretende sumarse un año más a la movilización del 8-M para alzar su voz, para reivindicar un mismo sentimiento: "Yo valgo". Y así luchar contra todas la etiquetas.