Cientos de personas se congregaron el pasado lunes en el municipio de Guía Isora, en Tenerife, para despedir a un conocido vecino, un motorista fallecido en un accidente de tráfico.

Muchos de los asistentes al entierro sí portaban mascarillas pero otros no llevaban la protección, tal y como se pueden ver en los vídeos difundidos en redes sociales. Además, no se respetó la distancia de seguridad necesaria para evitar el contagio del coronavirus.

En el vídeo se observa cómo los asistentes se apretujaban en torno al ataúd, lo besaban e incluso bailaban al son de la música.

El Gobierno de Canarias, instado por la Consejería de Sanidad, ha pedido a la Policía autonómica que abra una investigación sobre lo ocurrido y que se impongan las sanciones pertinentes. Durante la fase 2 de la desescalada, en la que se encuentra Tenerife, solo se permite la asistencia a los entierros de hasta 15 personas.

Por su parte, el Ayuntamiento de Guía de Isora ha "lamentado" los hechos y ha argumentado que atendió la solicitud de una asociación de motoristas de rendir homenaje al fallecido, pero siempre que cumplieran una serie de medidas de protección. Algo que, a juzgar por las imágenes, no ocurrió.