El asesinato de Ingrid Escamilla por parte de su pareja ha sido la gota que ha colmado el vaso del movimiento feminista en México. Con solo 25 años, fue desollada y descuartizada por Francisco Romero. Minutos después de matarla, describía la escena casi como si la hubiera matado en defensa propia: "La maté con el cuchillo que me golpeó; se lo enterré en el cuello".
Además de ese vídeo, el escándalo han sido las imágenes del cuerpo sin vida de Ingrid filtradas y publicadas en portada de varios periódicos de sucesos. Los medios han recibido la ira de las manifestantes: "Por lo que estamos peleando es por mantenernos vivas", afirma una manifestante, mientras que otra critica que las fotografías del cadáver "revictimizaron a Ingrid y se hicieron virales".
Las fotografías del cadáver se viralizaron
La irresponsabilidad de la prensa llegó poco después a las redes, donde las fotos se viralizaron. Eso sí, gracias a los mismos internautas ahora han quedado enterradas bajo una oleada de tuits con ilustraciones.
Las feministas piden también más implicación a sus políticos. Tiñen la puerta del palacio presidencial de rojo sangre para pedir al López Obrador más que esta respuesta dubitativa: "Celebramos que las mujeres defiendan su derecho a la seguridad", afirmó el presidente de México ante la pregunta de una periodista de cuál era su postura hacia las mujeres.
Diez mujeres asesinadas al día en México
Lo hacen por Ingrid pero también por todas las demás. Porque en México son asesinadas una media de diez mujeres al día.
