"Querido santo padre, tengo 24 años y soy miembro supernumerario del Opus Dei". Así comienza su carta el joven granadino, cinco folios dirigidos al papa Francisco, donde relata su tremendo calvario“Las prácticas sexuales más frecuentes iban desde masajes a masturbaciones y besos en la boca”.
Más adelante según publcia 'El País', da muchos más detalles ante la Policía sobre esas prácticas sexuales, con orgías y masturbaciones colectivas. En la carta le cuenta al papa francisco que empezó aacudir con solo siete años a la iglesia donde oficiaba misa uno de los detenidos, allí comenzó su amor por la iglesia y también su pesadilla.
"Durante aquel tiempo sentí que me volvía loco: siempre me habían gustado las mujeres y me encontré que estaba viviendo una sexualidad entre hombres que además eran sacerdotes que se supone que debían vivir bajo los principios de la castidad y el celibato apostólico".
Relata cómo poco a poco le fueron lavando el cerebro, hasta conseguir que con 17 años abandonara la casa de su padres y se fuera a vivir a la casa parroquial. Los abusos, asegura, se producían ahí y en las otras propiedades del clan de 'Los Romanones', allí sabían lo que pasaba según el joven muchos otros sacerdotes.
"Al resto de sacerdotes no los vi participar, pero sí que estaban informados de lo que se hacía en la habitación de este hombre”. Ya se han producido las primeras detenciones. Son tres sacerdotes y un laico a los que se les imputa un delito de abusos sexuales a menores.
"Cuatro personas van a ser imputados por un presunto delito de abusos sexuales a menores", ha explicado Jesús Bastante, redactor de 'Religión Digital'. Uno de ellos es el sacerdote de la iglesia a la que acudiá el denunciante, él es el presunto cabecilla del clan. Otro de lo detenidos es un juez diocesano, un alto cargo de confianza del arzobispo de granada perteneciente a la curia.
Los detenidos han sido trasladados a un chalé de Pinos Genil dónde se pudieron producir los abusos para un registro policial. 'Religión Digital' anuncia próximas detenciones y los encubridores podrían ser los próximos en caer.