Las farmacéuticas siempre ganan. Es la conclusión que se puede sacar después de que Bruselas haya decidido aparcar la vía legal contra AstraZeneca y Pfizer/BioNTech por los retrasos en las entregas de vacunas convenidos con la Unión Europea.

Según uno de los pocos afortunados que ha leído los contratos reservados que se ha firmado con la industria farmacéutica, el periodista de 'Il Corriere della Sera', Lorenzo Salvia, "ahora mismo ni la Unión Europea ni los estados miembros pueden hacer nada".

La razón: los contratos que Bruselas acordó con las fabricantes de vacunas establecen un reparto trimestral de las vacunas, no semanal, lo que les da de margen hasta finales de marzo para entregar todas las pactadas. Además, después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) haya aprobado la extracción de seis dosis de cada vial, las compañías pueden "elevar" el número de pinchazos entregados. En el contrato se habla siempre de dosis y no de los envases a enviar.

Sanción compleja

Si Pfizer no entregara en esa fecha las vacunas convenidas, tampoco sería sencillo sancionarla. Tal y como detalla el periodista italiano, existe una cláusula que recoge las opciones que tendrían los laboratorios: en primer lugar, devolver el dinero de las dosis que no se hayan entregado; romper el contrato -y el suministro-; o ya la sanción, propiamente.

"Si hay solución, a esta no se llegará en los tribunales, sino que será un acuerdo entre 'hombres buenos'", asevera Salvia.

Bruselas pide explicaciones

La Comisión Europea ha pedido en las últimas horas explicaciones a AstraZeneca tras anunciar la compañía retrasos en la entrega de su vacuna a la UE, pero ha evitado por el momento hablar de posibles acciones legales y ha asegurado que su actuación se centra en conseguir que el grupo farmacéutico cumpla con el calendario previsto.

Esta mismo lunes, la jefa del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, ha telefoneado al consejero delegado de AstraZeneca, Pascal Soriot, a quien ha "dejado claro" que Bruselas espera que la empresa "cumpla con las obligaciones" establecidas en el contrato para la compra de al menos 300 millones de dosis de su vacuna.

Además, la alemana ha recordado que la UE ha invertido "cantidades significativas" de recursos para "precisamente garantizar un aumento de capacidad de producción" de vacunas de incluso antes de que sea aprobada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA), algo previsto en principio para este viernes.

En paralelo, la comisaria de Salud, Stella Kyriakides, ha enviado una carta a AstraZeneca en la que pide a la firma "más aclaraciones" tras conocer el retraso en las entregas y "enfatiza la importancia de que su distribución tenga lugar de acuerdo con el calendario previsto".