Zeinepa Galibova se encontraba en Bulgaria cuando tuvo la idea de grabar un vídeo suyo con contenido sexual para su marido, que en ese momento se encontraba en Reino Unido por trabajo.
Lo que se suponía que iba a ser una noche divertida, acabó convirtiéndose en la peor pesadilla para Galibova. La mujer no se percató que en lugar de enviar el vídeo a su pareja, estaba retransmitiendo en vivo la grabación en su Facebook y compartiéndolo con sus 2.000 contactos, según informa The Sun.
En las imágenes del vídeo se ve como la mujer, que se encuentra tumbada en la cama, se acerca a la cámara y enfoca repetidamente a diferentes partes de su cuerpo. Galibova afirmó que el vídeo fue grabado por aburrimiento y confiesa que ha tenido que recurrir a sus amigos cercanos para superar el mal trago.
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