Me parecen bien que se puedan casar, pero...; el colegio es para educar, pero...; así es el síndrome del pero y un equipo de laSexta ha encontrado casos en la calle. "Me da igual cómo se llame la unión entre un hombre y un hombre, entre una mujer y una mujer, pero creo que debería haber tres nombres diferentes", asegura un hombre en la calle. "En Andalucía, por ejemplo, el cambio de sexo es gratis, pero no estoy de acuerdo", dice una mujer.

"En los últimos años han resurgido mensajes llenos de LGTBFIfobia que ya creíamos superados", explica Carlos Castaño, de la FELGTB. Se refiere, por ejemplo, al rechazo a que se llame matrimonio la unión entre dos personas del mismo sexo.

Para este tipo de actitudes, la FELGTB ha puesto en marcha una campaña con un medicamento simbólico contra la LGTBIfobia.

"El 'Argumentine' es para que toda la gente que está comprometida tenga herramientas para combatir esos discursos. El 'Argumentine' son los argumentos que todos necesitamos para combatir el 'síndrome del pero'", apunta José Manuel Espinosa, director creativo de 'Matchpoint'.

Una batalla que se librará también desde los taxis, porque, dicen, que no sólo quieren prestar un servicio público, sino contribuir a construir una sociedad tolerante.

"Percibimos que cuando salen estos temas en conversaciones, hay gente que muestra sus peros. Son derechos adquiridos y consolidados que benefician al conjunto de la sociedad y al conjunto del país", indica Jesús Fernández, vocal de 'Antaxi'.

Derechos que llevan macerándose cuatro décadas que podrían ponerse en peligro ante la reapertura, por parte de una minoría, de debates ya superados.