La obesidad infantil y el sobrepeso es ya una realidad en nuestro país. Uno de cada tres niños y niñas la sufren, siendo los desayunos y las meriendas donde peores productos se consumen. Tanto es así que el 31% de los menores desayunan bollería industrial de forma habitual.

Son unos datos que preocupan, ya que un 76% de los escolares deberían de mejorar su alimentación. Un problema que también entiende de clases sociales, como ha denunciado el ministro Alberto Garzón. "Se dan el doble de casos de obesidad en las familias con menos recursos. Las familias más vulnerables tienen menos tiempo para poder dedicar a una cocina más saludable", explicaba.

Esto afecta a un 23% de niños que viven en familias con rentas inferiores a los 18.000 euros. Sin embargo, ante este panorama, casi el 90% de los padres y madres desconocen por completo que sus hijos tienen este problema. Para ello, se ha creado una campaña en la que, a través de un grupo de Telegram, un chef ayuda a los padres para crear recetas saludables.

No solo ayuda en la alimentación, también a través de consejos para llevar un estilo de vida saludable.