El coleccionista Marek Tomaszewki ha hecho público un hallazgo revelador: un álbum con 96 fotografías inéditas que documentan el horror de ese primer viaje de prisioneros polacos al campo de concentración de Auschwitz. El campo de exterminio nazi más grande de Alemania.

Este descubrimiento es muy importante para los historiadores de la materia ya que se incluyen documentos y testimonios reales nunca antes vistos. Hasta el momento, los expertos solo conocían unas pocas imágenes de estos trágicos traslados y ahora, este álbum se ha convertido en una fuerte histórica.

En una de estas fotografías se cuentan a un total de 728 prisioneros polacos mientras eran deportados a Auschwitz el 14 de junio de 1940. Son las primeras víctimas del campo de exterminio nazi.

Los prisioneros de pie en la plaza Dożywocie en Tarnów (hoy la plaza de los prisioneros de KL Auschwitz).

Prisioneros frente a una casa de baños en Tarnów.

"Imagínese la reacción de un entusiasta, coleccionista de recuerdos regionales, que en un día sombrío, sentado en su habitación, recibe un mensaje de su colega en Canadá con un archivo adjunto. Al abrirlo, revela fotografías de un evento muy significativo en la historia de la ciudad y del país, de los cuales la documentación fotográfica conocida hasta ahora es muy escasa", ha explicado Marek Tomaszewski al comienzo del libro que se publica coincidiendo con el 83 aniversario de la apertura de las puertas de este infierno.

Prisioneros en la estación de tren de Tarnów.

"Es un recuerdo de la época del servicio, probablemente perteneciente a uno de los miembros del destacamento de la Policía del Orden Alemán (Schutzpolizei) estacionado en 1940 en el cuartel inferior de la calle Chyszowska (ahora Mościckiego) en Tarnów", ha añadido Tomaszewski sobre el posible autor de las fotografías.

Marchando por la calle Krakowska en Tarnów.

Miembros de la Schutzpolizei en la estación de tren de Oświęcim (Auschwitz).

La rampa de almacenamiento del monopolio del tabaco en Oświęcim, donde se ubicaron los primeros presos.

"Ninguno de estos hombres, que en la madrugada del 14 de junio de 1940 marcharon bajo una escolta alemana fuertemente armada hasta la estación de tren de Tarnów, sabía el propósito de su viaje. Muchos de ellos nunca regresarían con sus seres queridos. Muchos de ellos sobrevivieron milagrosamente a la Segunda Guerra Mundial después de soportar largos sufrimientos en Auschwitz y otros campos", dice el Dr. Wojciech Płosa, jefe de los Archivos del Museo Memorial de Auschwitz.