Además de asesor de Telefónica, Rato ocupaba hasta hace poco un puesto similar en el banco turco Akbank y anteriormente en el Banco Santander, aunque con la llegada de Ana Patricia Botín a la presidencia del grupo, este órgano desapareció.
A mediados de noviembre de 2014, el Santander decidió disolver su consejo asesor internacional, el órgano no ejecutivo del que formaba parte Rato y que servía para sugerir y aportar ideas al consejo de administración del banco sobre oportunidades de negocio.
En el caso de Telefónica, Rato formaba parte de los consejos asesores de Latinoamérica y Europa de Telefónica desde principios de 2013, meses después de haber dimitido como presidente de Bankia y pese a encontrarse inmerso en el proceso judicial para esclarecer en la Audiencia Nacional lo sucedido con la entidad financiera.
Sin embargo, las labores más destacadas como asesor de Rato comenzaron desde 2008 cuando fue fichado por el Banco Santander, aunque posteriormente, con su llegada a la presidencia de Caja Madrid en 2010 abandonó este cargo, que sin embargo recuperó en septiembre de 2013.
Por sus funciones en el Santander, cobraba entonces unos 200.000 euros anuales y el entonces presidente de la entidad, Emilio Botín, aseguraba estar "muy satisfecho" por el hecho de que Rato hubiese aceptado formar parte de la entidad. En Telefónica, según fuentes del mercado, Rato cobraría una cantidad similar.