Cuando los policías que viajaban con Rodrigo Rato cruzaron las matrículas, se percataron de que era un coche de Vigilancia Aduanera de Hacienda. El autor del milagro económico español está siendo investigado por blanqueo de capitales, alzamiento de bienes y delito fiscal.
Según un medio español, la Policía da la siguiente orden: "Poner ese coche patas arriba hasta saber qué está pasando". Y a partir de ahí, conversaciones en tono airado entre ambos cuerpos.
La Policía reprocha a Vigilancia Aduanera que trabaje a sus espaldas. Y Vigilancia Aduanera desvela que las órdenes las está dando el Juzgado de Instrucción Número 35 de Madrid. Pero además, es una investigación que llevaba tiempo gestándose.
Policía y Hacienda ya están en permanente contacto. La detención de Rato es inminente. Incluso el calabozo en Chamberí está preparado. Está todo preparado para tomar las huellas digitales y fotografiar al detenido. La puesta en libertad de Rodrigo Rato fue petición expresa de la Fiscalía Anticorrupción. Muchas luces y sombras mientras se estrecha el cerco sobre uno de los íconos del Partido Popular.