Lo sabían dos semanas antes. Para los policías que espiaban a Bárcenas no fue una sorpresa el intento de robo en su casa.

Los agentes del dispositivo 'Kitchen', pagados por Interior, conocían que algo iba a ocurrir en el domicilio familiar, según revela OKdiario.

Los policías incluso, para facilitar las cosas, aseguraron durante horas las inmediaciones. Un minucioso control para que la misión no fracasara. Era el momento, con Bárcenas estando en prisión.

Pero los planes de la cúpula de Interior irían más lejos. Según Okdiario, el plan contemplaba asaltar y secuestrar a la familia Bárcenas.

Todo para que el falso cura pudiera hacerse con tres pendrives que contendrían, supuestamente, información comprometida que afectaría a Rajoy, Cospedal, Sáenz de Santamaría o Javier Arenas.

De nada sirvió aquella cobertura especial que dieron los policías espías al falso cura. Aquel asalto, como se conoce, falló.