Son los últimos en agotar la paciencia de Ruz. Carlos Cuevas, secretario general del PP en La Rioja, y Ana Elvira Martínez, la gerente. Ayer tenían que explicarle al juez como testigos qué pasó con la compra de la sede del PP en Logroño en 2008 pero acabaron desquiciando al magistrado a base de olvidos reiterados y unas cuantas contradicciones.
El tema en cuestión era el siguiente: 200.000 euros en negro que Bárcenas anotó en sus papeles como entrega de La Rioja con fecha de mayo de 2008. Y el ingreso a cuenta del PP riojano de la misma cantidad un mes más tarde.
Pero no hubo manera. Según Fuentes de la Audiencia, solo dijeron que el dinero llegó de Génova a fondo perdido para ayudar en la compra del local. Pero ninguno supo aclarar quién negoció aquella ayuda, ni quién gestionó los créditos para la operación. Vamos, todo lo contrario de lo que explica el PP riojano.
"El PP no tiene ningún tipo de amnesia y está colaborando con la justicia", afirma Francisca Mendiola, senadora del PP por La Rioja.
Muy tranquilos no se les vio a los dirigentes del PP riojano. Por ejemplo, Carlos Cuevas, preguntado por si conocía a Bárcenas dijo que le había visto una vez en un acto con más de 100 personas. Pero se le recordó que fue senador justo cuando lo fue Bárcenas, y entonces sí admitió que coincidían pero eso sí, no eran amigos.
Así que Ruz reventó y decidió algo muy poco habitual. Que en 48 horas se le haga entrega de toda la documentación de la sede en Logroño.