La Justicia belga ha rechazado entregar a España al rapero mallorquín Josep Miquel Arenas, conocido como Valtònyc, al que la Justicia española reclama tras ser condenado por amenazas, enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona.
Un proceso que se ha demorado más de un año y para el que cabe recurso. En este tiempo, el juez de Gante elevó al Tribunal Constitucional belga el caso de los ataques al Rey, alegando la ley belga de 1847 que protege la figura del monarca y que el alto tribunal declaró inconstitucional al considerar que colisiona con la libertad de expresión y "no satisface una necesidad social urgente y es desproporcionada con el objetivo de proteger la reputación de la persona del Rey".
Este fallo fue celebrado como un triunfo por los abogados de Valtònyc, que lo consideraron un espaldarazo a su caso y señalaron que su situación puede acabar impulsando cambios legales en el ordenamiento jurídico de Bélgica.
La entrega del rapero, que huyó de España en junio de 2018, ya fue rechazada en primera instancia. Ahora, tras esta nueva negativa, tanto la Fiscalía como la defensa pueden recurrir la sentencia y agotar la vía legal acudiendo al Tribunal de Casación, que estudiaría cuestiones formales durante el proceso judicial sin entrar al fondo.
Durante todo el proceso, la defensa de Valtònyc se ha mostrado segura de que siguiendo los estándares europeos no hay margen para que su cliente sea entregado a España, si bien en la última vista, cuando se fijó la fecha del 28 de diciembre, expresaron el deseo del cantante de que, en caso de ser extraditado por el delito de amenazas, se le deje cumplir condena en Bélgica.
España le reclama para que cumpla los tres años y medio de cárcel que la Audiencia Nacional le impuso por enaltecimiento, calumnias, injurias graves a la Corona y amenazas.