Meses antes del intento de golpe de Estado, para Suárez sólo se salvaba uno, lo tenía tan seguro quel o dejó por escrito. Son nuevos documentos que ahora pone sobre la mesa su hijo, Adolfo Suárez Illana, lo hace para corroborar la buena relación entre Suárez y el Rey y desmontar las teorías de Pilar Urbano.

Según estos documentos, Suárez no tenía nada claro quién estaba detrás del 23F. El día después del intento golpista hizo su lista de sospechosos y en ella aparecen los nombres de los militares que urdieron la operación Galaxia, con la que creyó que había conexión. En ella aparece Tejero, pero el más nombrado es el capitán Sáenz de Inestrillas, del que Suárez escribió que ocultaba cosas.

En los documentos también se despejan dudas sobre su dimisión. Antes de afirmar en televisión que su marcha era más beneficiosa para España, Suárez pactó con el rey la hoja de ruta y la dejó por escrito.

Además, plasmó que Leopoldo Calvo Sotelo era una salida a la situación, una "solución seria, responsable y patriota". Vio en él una forma de mantener el Gobierno hasta el 83 e incluso de ganar las elecciones. Sin embargo, las escrituras no se cumplieron. Calvo Sotelo sólo aguantó hasta 1982, después ganó Felipe.