La Fundación Centro de Estudios Jordi Pujol ha anunciado que ha iniciado los trámites para su disolución, tras casi diez años de existencia, en virtud de un acuerdo adoptado por unanimidad entre los miembros del patronato.
La fundación constata, en un comunicado, que en la situación actual, tras la confesión de fraude fiscal de Jordi Pujol, será "muy difícil" desarrollar sus tareas, obtener mecenazgo privado o firmar convenios con otras entidades e instituciones para impulsar proyectos.
El Centro de Estudios subraya que sus cuentas han estado "puntualmente presentadas a las instituciones competentes sin incidencias" y que las aportaciones económicas recibidas en la última década han sido "destinadas correctamente a los objetivos fundacionales".
En este sentido, tras una reunión celebrada a principios de septiembre, los miembros del patronato han constatado su "satisfacción" por la gestión y el trabajo hecho por el Centro de Estudios Jordi Pujol en sus casi diez años de existencia y tienen "la esperanza de que más adelante se puedan retomar las actividades principales".
Esta fundación, creada en 2005, estaba presidida por Jordi Pujol y organizaba seminarios y conferencias sobre política y valores, al tiempo que impulsaba publicaciones y gestionaba becas para realizar estudios sobre el ámbito político.
Además, desde esta plataforma, Pujol, tras retirarse de la primera línea política, escribía periódicamente editoriales en las que comentaba la actualidad y reflexionaba sobre valores como la ética. La disolución de esta fundación se inicia después de que el fundador de CDC confesara que su familia tuvo cuentas en el extranjero ocultas durante décadas.