Un total de 100 días de Gobierno y siete decretos leyes, es la fórmula que ha aplicado Pedro Sánchez para la exhumación de los restos de Franco. "No podemos perder ni un sólo instante", recordaba la vicepresidenta, Carmen Calvo.

Pero el formato no convence a la oposición. "Vamos a recurrir todos aquellos reales decretos que no tengan carácter de urgencia", asegura Teodoro García, secretario general de Partido Popular.

El Valle de los Caídos será un cementerio civil porque, según el presidente del Gobierno, "no puede ser un lugar de reconciliación, sino un lugar de reposo". Y no un centro para la recuperación de la memoria histórica, como planteó Sánchez cuando todavía no era presidente.

Otro reto del Gobierno socialista es aprobar los presupuestos para 2019. "Este Gobierno hablará con todas las fuerzas políticas que pueda", señalaba la portavoz, Isabek Celáa.Pedro Sánchez, con sólo 84 diputados, necesita apoyos y Podemos está abierto a la negociación. Juntos quieren acabar con el veto del Partido Popular en el Senado en la senda de déficit.

La crisis migratoria, que ha sido otro de los asuntos más acuciantes para el Gobierno socialista, comenzó con el buque Aquarius. Tiene que llegar a un acuerdo con todas las comunidades para el reparto de migrantes, tras la polémica devolución de más de un centenar de subsaharianos en Ceuta. "Cuando uno se da de bruces con la realidad, se da cuenta de que cometió un error", indicaba Juanma Moreno, presidente del PP en Andalucía.

El estreno del Gobierno ha sido decepcionante para Ciudadanos y el Partido Popular. "Este es un Gobierno sin proyecto de país, parece un Comité Electoral para unas elecciones", señalaba Albert Rivera.

El PSOE tiene por delante un mes de septiembre cargado de desafíos.