Se cumple una semana desde que el PSOE propuso al PP una reunión entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. La primera de las tres fechas propuestas era este lunes y la respuesta desde el PP aún no ha llegado. La polarización de la política española es tal, que ahora mismo la lucha por el relato está en una foto, la del saludo en la escalinata de Moncloa. El problema ya no está solo en alcanzar un acuerdo para avanzar en el bloqueo del CGPJ, la financiación autonómica o la reforma de la Constitución. La dificultad está en el propio hecho de reunirse.

Fuentes del Gobierno a laSexta acusan a Feijóo de romper la institucionalidad y le califican de "líder de la oposición a la fuga". Del hasta ahora de Feijóo de acudir a Moncloa siempre que un Gobierno le citara, se ha pasado al silencio en Génova 13, que no confirma que se vaya a producir el encuentro. Las mismas del Gobierno citadas señalan que la pelota está en el tejado del PP, que saben las fechas y la propuesta de temas de Sánchez y que una vez más, señalan, Feijóo está cediendo a las presiones del ala dura de su partido, en referencia a la presidenta Ayuso o al expresidente Aznar. Y recuerdan que esos mismos, según creen ellos, le hicieron el grupo parlamentario y le impidieron renovar el CGPJ.

El portavoz del PP, Borja Sémper, ha denunciado en rueda de prensa tras el Comité de Dirección que "la situación por la que atraviesa España es de tal gravedad que es una vergüenza que el presidente anuncie a través de los medios" que quiere reunirse con Feijóo. "Es lamentable que propongan fechas y no hablen de contenido", ha añadido. Así, ha reiterado que no saben de qué quiere hablar el presidente del Gobierno y ha evitado hablar de los temas que querría tratar el PP. "Yo no voy a decir en público de qué queremos hablar con Sánchez sin decírselo antes a él. Es poco serio", ha explicado.

"España no está para este navajeo a corto plazo"

Borja Sémper, portavoz del PP

Por ello, para el PP, desvela Sémper, "solo cabe una conclusión, que esta petición de reunión es pura táctica". "Quieren tenernos enredados en si reunión sí o no, la misma semana en la que van a pasar cosas muy graves en el Congreso. No vamos a aceptar una táctica torticera de Sánchez", ha señalado. Preguntado sobre si el PP no ha recibido información oficial del PSOE de los temas que quieren tratar en la reunión, Sémper ha insistido en que al PP no les han dicho de qué temas quieren hablar y ha llegado a calificar la estrategia socialista de "navajeo. "España no está para este navajeo a corto plazo, y menos cuando lo diseña Sánchez", ha sentenciado Sémper.

Antes, esta mañana, la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, reprochaba al presidente del Gobierno que "lo único que le interesa es una foto" con el líder de los 'populares' para blanquear las relaciones que mantiene otros líderes políticos. En una entrevista en La Vanguardia, Gamarra ha insistido en que les "preocupa el para qué" de un encuentro entre ambos dirigentes. El Gobierno hizo públicos la semana pasada los temas que se querían abordar y fuentes de Moncloa insisten en que se comunicaron los asuntos a tratar, junto con las fechas, al equipo de Feijóo el lunes pasado. Mientras, el PP se sigue resistiendo. Algunos barones 'populares' creen que la cita debe ser pasadas las Navidades, aunque otros, de los más veteranos, creen que el PP no puede perder la institucionalidad. El PSOE insiste en que el PP al menos tiene que sentarse a hablar.

Y todo en una semana en la que Sánchez y Feijóo vivirán su primer cara a cara en el Congreso tras la investidura. El líder del PP preguntará al presidente Sánchez en la sesión de control si "¿cree que los españoles podemos confiar en sus compromisos?". Una cuestión que asegura el rifirrafe entre los líderes políticos bajo un clima de alta tensión.

Sánchez acude al pleno de la Cámara del miércoles a petición propia y del PP para dar cuenta de los últimos consejos europeos -sobre la presidencia española del Consejo de la UE y en torno a la guerra de Gaza-, aunque lo cierto es que la política interna centrará el debate.

Un debate que llega con la ley de amnistía encaminada y con visos de que su debate de enmiendas a la totalidad se produzca la segunda semana de enero, tras la celebración de la festividad de Reyes. Un tema que si ya había encrespado al PP, que sigue avisando que hará todo lo posible por oponerse a esta proposición de ley tanto en el Senado como en los tribunales nacionales e internacionales, se suma al apoyo que los socialistas navarros han dado a Bildu para desbancar a la alcaldesa de UPN en Pamplona.

Feijóo llegará al Congreso tras haber participado este domingo en la manifestación contra la moción de censura a su alcaldesa y, previsiblemente, volverá a echar en cara a Sánchez un pacto "miserable", "el pacto encapuchado" que considera que acordó el Gobierno con Bildu para mantenerse en la Moncloa.

El debate parlamentario, que se prevé encendido tanto por parte del PP como de Vox, se produce sin fecha de reunión entre Sánchez y Feijóo para hablar del desbloqueo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), de la financiación autonómica y de la reforma del artículo 49 de la Constitución. "Si las posibilidades de entendimiento... no eran muchas... desde hoy son muchas menos", avisó Feijóo el día que se conoció la moción en Pamplona.

El encuentro de Sánchez con Feijóo está pendiente de cerrarse mientras que el jefe del Ejecutivo se reúne el jueves con el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, para hablar del conflicto político, de financiación y del traspaso de Rodalíes, y acude con otra cita en el aire, la planteada por el líder de Junts, Carles Puigdemont.