En los atentados de
Borough Market y el Puente de Londres ha habido 8 muertos y la identificación
de esos cadáveres ha tardado 4 días. Una cifra exagerada si lo comparamos con las
explosiones del 11M en Madrid. Murieron 192 personas. Sólo tardaron 12 horas en
identificar al 80% de las víctimas. A los 2 días, la mayoría de las familias ya
habían enterrado a sus seres queridos.
La clave de esta diferencia está en las huellas dactilares de nuestro DNI. En España, a diferencia de en Reino Unido, todos tenemos que dar nuestras huellas al sacarnos el carné. Así que los forenses sólo tienen que tirar de ellas para identificar la mayoría cadáveres. Por el contrario, los británicos tienen que hacer lentas pruebas de ADN o de registros dentales.
A Zoido, la lentitud británica le ha molestado pero este viernes ha
suavizado el tono y en la reunión con sus homólogos europeos en Luxemburgo, ha
propuesto crear una carta europea de derechos de las víctimas, inspirada en la
legislación española, para evitar sufrimientos administrativos innecesarios.
La lentitud británica en
este asunto se vio también en los atentados de Londres en 2005. 52 muertos en
el metro y un autobús. Algunas víctimas tardaron en ser identificadas 11 días.
Sin embargo, el año
pasado en Niza, con muchas más víctimas, 84, tardaron menos de la mitad: 5 días. Aún más rápidos fueron
los forenses tras la bomba de Hipercor de 1987. 21 cadáveres, muchos en muy mal
estado, que se identificaron, hace 30 años, en 2 días.